abril 08, 2008

Unos se van... y otros acaban de llegar.







La abuelita de casi un siglo se fue con todo lo que una persona con tanta vida a cuestas es capaz de llevarse... una vida. Completa.
La noche de su 99 cumpleaños entró en un hospital, y allí se dejó ir, poco a poco.
Y se fue.
Por eso cuando veo a Mauro pienso... una vida recién estrenada, aún por escribir, aún por vivir... sin tarta de cumpleaños porque no ha tenido tiempo. ¿Cómo será su vida? ¿cuánto durará? ¿cuánto tiempo compartiré con él? Tantas cosas...
En fin, es la ley, unos se van y otros llegan.