Una tarde enderezada

Pues es que hoy, después de sufrir una mañana entera con la sorpresa de tener que empezar con el planteamiento del tercer -y espero que último- cásting de inquilina, la tardenoche ha dado un giro de 180 grados y me la he pasado con Rut y Maika en su casa nueva de Mr. Meroy Lerlín, seguidito con Leo, el tímido canalito positivo, y con Myriam en los bares de Lavapiés hasta las tantas de cañitas y conversación positiva. Leo es un buen tipo y Myriam es básicamente encantadora.
Cuando hemos pasado por delante de La buga, he recordado fotografiar uno de mis trabajos más vistos y menos agradecidos.